El Gobierno de Canarias y la Fundación Global Nature presentaron hoy los resultados preliminares del proyecto europeo AgriClimateChange

El Gobierno de Canarias y la Fundación Global Nature presentaron hoy los resultados preliminares del proyecto europeo AgriClimateChange

El consumo de energía y la emisión de carbono del plátano y el tomate canarios son menores que los de cultivos extensivos como el olivar

Esta iniciativa, en la que colabora el sector agrario de Las Islas y que lidera el Archipiélago, promueve la creación de la herramienta única europea de medición de la eficiencia energética y climática en las explotaciones agrarias

CANARIAS.- El consumo de energía y las emisiones de carbono de una tonelada de plátano o tomate canario, son entre 4 y 5 veces inferiores a los de cultivos extensivos, como por ejemplo el olivar. Éstas son algunas de las conclusiones que se extraen del proyecto europeo AgriClimateChange, una iniciativa que ha puesto en marcha el Gobierno de Canarias y la Fundación Global Nature con el apoyo del sector agrario de las Islas, y que promueve la creación de la herramienta única europea de medición de la eficiencia energética y climática en las explotaciones agrarias. En el acto de presentación de los resultados preliminares de este programa, celebrado en Santa Cruz de Tenerife, se puso de manifiesto que aunque estos cultivos típicos de Canarias tienen por regla general, una media mayor de emisiones de gases de efecto invernadero (GEIs) por superficie que otros cultivos españoles de tipo extensivo-en el caso del plátano o tomate canarios 10 veces superiores a un olivar extensivo-, al obtener rendimientos más altos, el consumo de energía y de emisión de carbono es mucho menor por kilo producido. El Archipiélago lidera esta acción, que se enmarca en el Programa Europeo LIFE+ y cuyo objetivo es medir con un criterio único las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI’s) en cualquier explotación agroganadera y agroforestal del territorio europeo a través de una eficaz herramienta para mejorar la competitividad del agricultor, disminuyendo su consumo energético y facilitando una comercialización diferenciada de sus producciones. Reducir el consumo energético y las emisiones de gases de efecto invernadero en la agricultura permite al agricultor ahorrar costes de producción, y por tanto ser más competitivos en los mercados, y se perfila, en un futuro, como la puerta de entrada para fondos económicos. El proyecto, que se encuentra en fase de ejecución y cuyos resultados definitivos se presentarán a finales de 2013, posibilitará el desarrollo de una herramienta que, a diferencia de otras, permite analizar de una forma sencilla explotaciones agrícolas con producciones totalmente dispares, con las singularidades de cada una de ellas, pudiendo comparar tanto su eficiencia energética como sus emisiones, y pudiendo establecer planes de acción que permitan ser cada vez más eficientes frente a otras formas de cultivo. En el encuentro, el representante de la Fundación Global Nature en Canarias, Antonio Rodríguez Rodríguez, indicó que se están evaluando cultivos canarios, como el tomate, viñedo, flor cortada y plátano- atendiendo a su especificidad y singularidad-, muy dispares de la generalidad de los cultivos centroeuropeos, apostando así por diferenciar la producción canaria frente a las competidoras de países tropicales y subtropicales, donde los mayores costes energéticos de producción, más los de transporte, podrían favorecer a las producciones canarias dentro de las próximas políticas agrarias y comerciales de la Unión Europea. Lo que se busca es acompañar al agricultor en la implantación de planes de acción para abordar reducciones de consumos energéticos y de gases de efecto invernadero de entre un 5 y un 25%, con medidas agronómicas que permitan desarrollar de manera sencilla y barata estas reducciones, como cambios en la fertilización, consumo de agua, optimización de fitosanitarios, eficiencia de los invernaderos, etc. Son actuaciones que además contribuyen a apoyar la calidad ambiental que debe caracterizar y acompañar al producto canario. Durante su intervención, el viceconsejero de Agricultura y Ganadería, Alonso Arroyo, destacó la importancia de estos estudios para el sector agrícola canario, en especial en los subsectores del plátano, tomate, y flores y plantas de las Islas, que siguen la línea de mayor respeto por el medio ambiente propuesta por la Unión Europea y que se manifiesta en la Política Agraria Común (PAC) de aquí a 2020. “Sin duda alguna, el buen agricultor es el mejor cuidador del medio ambiente, añadió el miembro del Ejecutivo. Por su parte, la viceconsejera de Medio Ambiente, Guacimara Medina, defendió la necesidad de “apoyar con hechos” la sostenibilidad en Canarias y, en este sentido, anunció que en 2013/14 se presentarán los resultados de los estudios que el Gobierno de Canarias está desarrollando para luchar contra el cambio climático, “un objetivo prioritario”. El director general de la Fundación Global Nature, Eduardo de Miguel, señaló que la agricultura canaria podría aprovecharse de varias estrategias para el posicionamiento de sus productos que emanan del actual proyecto LIFE, que se viene desarrollando desde 2010, como la iniciativa puesta en marcha por la Región de Murcia con la creación de la marca“Less CO2” (“Menos CO2”), con la que posiciona productos de sistemas intensivos en Europa como melocotón o cítricos entre otros. La Comisión Europea ha contratado al socio francés del proyecto, SOLAGRO, para la elaboración de la herramienta definitiva de evaluación de los balances energéticos en la agricultura. Este instrumento se elabora en base a la metodología que el proyecto LIFE ha generado a lo largo de estos dos años. Esto supone que Canarias, como una de las seis regiones participantes en el actual proyecto, se sitúa como punta de lanza a nivel europeo en el establecimiento de los criterios que, de manera definitiva, regirán las diferentes ayudas o requisitos que puedan emanar para la agricultura en el campo de la energía y de la lucha contra el cambio climático. La próxima reforma de la Política Agraria Común incidirá de manera particular en la lucha contra el cambio climático. La elaboración de un Plan de Desarrollo Regional para Canarias que incluya el aspecto energético de manera especial, permitiría la atracción de fondos complementarios para la agricultura canaria.