Se presenta denuncia ante Salud Pública por el campo de tiro de Adeje.

Se presenta denuncia ante Salud Pública por el campo de tiro de Adeje.

 

La Asociación Amigos en defensa de Ajabo, ha presentado una denuncia ante la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias, por las graves afecciones que causa estas instalaciones ocio-deportivas en la salud humana, a consecuencia de los efectos del ruido y el plomo.

ADEJE.– El colectivo vecinal, en el escrito presentado define al ruido como un sonido no deseado y, ante la percepción del “sonido no deseado” los animales, incluido el ser humano, se reacciona con alarma, urgiendo prestar atención inmediata, abandonando la ocupación que se realiza, o el sueño. De ahí que los animales reacciones huyendo, escondiéndose o, enfrentándose agresivamente, generando un alto nivel de estrés. Amigos en defensa de Ajabo argumentan la peligrosidad de los efectos del ruido, aportando el estudio realizado en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid, entre el periodo de enero de 1995 y diciembre de 2000, que demuestra que el ruido fue la causa medioambiental más relacionada con el ingreso hospitalario, siendo evidente, según exponen, que cuando una tarea precisa de la utilización de señales acústicas, el ruido de fondo puede enmascarar estas señales o interfiere en su percepción. Por otra parte un ruido repentino producirá distracciones que reducirán el rendimiento en muchos tipos de trabajo, especialmente en aquellos que exijan un nivel de concentración, pudiendo ocasionar accidentes domésticos, laborales o circulatorios. De ahí que según argumentan, el ruido de fondo no debe superar los 15 decibelios, ya que superando estos niveles, afecta a la salud y seguridad humana. La Asociación aporta las conclusiones de un estudio de la Organización Mundial de la Salud y publicado en Environmental Research, referente a los efectos del plomo, donde se señala que un 13% de los casos de retraso mental en la infancia pueden ser atribuidos a contaminación por plomo y que cuatro de cada diez niños presentan niveles altos de este mineral en la sangre. Aportan en estas conclusiones que durante el embarazo, el plomo cruza la placenta y llega al feto, describiendo malformaciones vertebrales, cardíacas, renales y en extremidades del recién nacido. Las distintas manifestaciones clínicas se correlacionan con los niveles de plomo en sangre. La encefalopatía plúmbica se relaciona con altos niveles de plomo superiores a 80 microgramos por decilitro (μg/dl), el deterioro cognitivo con 50 μg/dl, la neuropatía (enfermedad del riñón) con 40 μg/dl y la neuropatía periférica con 20 μg/dl. Incluso con valores bajos como 10 μg/dl puede aparecer anemia y con cifras menores de 10 μg/dl, deterioro intelectual infantil y en niñas, retardo en el inicio de la pubertad. Para el colectivo opositor a estas instalaciones, las conclusiones del informe de la OMS, explicita el gran peligro que supone el plomo, pues dicho material puede ser inhalado a través del sistema respiratorio, máxime cuando los disparos esparcen este marial y las corrientes de aire lo dispersan por la zona. “No es entendible que se priorice un ocio minoritario ante la salud de las personas”, afirman los miembros del colectivo.